La vida es neutra. Te lo cuento

Muchas gracias a todas la personas que habéis dedicado un ratito de vuestro tiempo a leer estas entradas que son un trocito de mí, gracias de corazón, porque esto me anima mucho a seguir escribiendo y compartirme, sabéis que lo podéis compartir si queréis, si os ha gustado, me encantaría que me pusieras un comentario, me ayuda a continuar y a crecer.

Si te paras un segundo a mirar estas expresiones o las que se te ocurran sobre como es la vida, te podrías dar cuenta que no es la vida, es como tú sientes tu vida, como tú creas tu día a día. Por qué se sincero/a, ¿realmente es la vida la que va rápido, la que te come, la que se carga encima de ti, la que te consume , la que hace que sientas asco?. ¿La vida te cuestiona tu vida?

Si contestas que sí, !ostras¡ no tengo más remedio que decirte que vayas a terapia, o no, ya que le echarías la culpa al terapeuta, de que tu vida es una MIERDA.

Sólo te puedo contar mi experiencia sobre la Vida, te puedo asegurar que yo a menudo y hace años, esta era mi expresión: «!Mi vida es una puta Mierda¡ «, salía por mi boca continuamente, y no precisamente cuando he estado enferma, por que ya me di cuenta de que no era la vida, sino la vida que yo me generaba, la que era una mierda.

Para llegar a esta reflexión, es cierto que he tenido que caer muchas veces, llegar al fondo del fondo del pozo más negro, de verme la cara con una sombra muy oscura que yo creía que era exterior, hasta que pude ver esa sombra, ese demonio, esa amargura, esa tristeza, esa locura estaba dentro de mí, me di cuenta de que yo era al 100% la responsable de mi vida. Con la ayuda de maestros, terapeutas, amigos, parejas, familia.

Cuando vi la sombra, la sentí, me odie con todas mis fuerzas, entonces sentí que eso todavía me destruía más, hasta el punto de que podría morir. Y eso no era un problema, sino más bien que moriría sin hacer la vida que yo quería hacer y sin poder hacer mi propósito de vida, es cierto que en aquella época no tenia un propósito.

También es cierto que no tenia ni idea de como quería vivir. Dejé de echar la culpa fuera y aún así me sentía desgraciada, había encontrado otra culpable, ya no eran mis padres, mi familia, el trabajo, mi exmarido, Dios, el presidente del gobierno, ahora era yo la única culpable. Esto no me consolaba y seguía sin saber que hacer, aunque me venia de lujo para seguir estando en el mismo sitio, en un papel de victima, victimisima, donde podría seguir machacando a alguien, aunque fuera yo misma, ¡como nos gusta juzgar, castigar, victimizarnos! aunque sea a nosotros mismos.

También sé por mi experiencia, que es muy duro no saber quien soy, quien eres, sin esa mierda que me cuento, que nos contamos.

Cuando estudié durante cinco biodescodificación a través de la Psicosomática Clínica y Humanista, el Curso de Milagros, Registros Akáshicos, etc. sentía, que ya había aprendido mucho, que ya sabía en dónde estaban mis sombras, y que además tenia unos programas, creencias limitantes que había heredado de mi clan, de mis padres, que absorbí en mi infancia, que se grabaron a fuego, y que poco a poco los iba moldeando, a veces tapando por otras creencias que me venían mejor, utilizaba los pensamientos positivos y me liberaba de los que me limitaban.

Aunque parecía estar super sanada, limpia de programas, e incluso ayudaba a otras personas en su crecimiento personal, mas de 300 personas en estos años, (por cierto algo que se me daba y se me da de lujo) siempre se dice que: «es más fácil ver la viga en ojo ajeno, qué ver la tuya en el propio», ¡que verdad es esto!. Estaba equivocada, ¡Y vaya que si lo estaba!.

Hasta que no he pasado por esta última experiencia del cáncer, no me he dado cuenta de todo lo que me quedaba aún por crecer, por liberar, por vivir y seguir con mi propósito de vida.

Por eso no me queda otra que decir gracias a la VIDA, como dice la canción, ¡que me ha dado tanto! Señoras y señores la vida es neutra, la vida te coloca en tu sitio, la vida te enseña que es lo mejor para ti, la vida te resetea, sólo te quiere enseñar lo que habías olvidado cuando bajaste a este plano, a esta densidad. Sólo tienes que dejar que la vida te respire, conectarte con tu corazón y entre los dos dejarte llevar, ellos hacen que tu intuición, ese pepito grillo, que siempre te acompaña y te cuida, y al que no escuchas, te guíe. Porque no te crees que eres lo suficientemente grande, valioso/a, merecedor/a, le silencias y callas, para seguir drogándote con tus programas heredados, con las historias que te montas, con tu subconsciente que te dice lo que tienes que hacer, que solo responde a esos programas, recuerdos, creencias limitantes, que están grabadas en tu sistema nervioso, que muchas veces ni si quiera son tuyas, porque moverte de tu zona de confort y dejar de ser una victima de tus propias paranoias o de las que heredamos, es más fácil, que plantarte y decir: «hasta aquí, ya no puedo más, ya no quiero seguir chutándome esta mierda de emociones, creencias que me limitan y no me dejan ser quien realmente soy».

No es sencillo, lo sé, lo vivo todos los días. Sé que estas cosas se han convertido en nuestra vida, como la heroína para yonqui, un drogadicto, que sin su dosis de dolor, de victimismo, no puede vivir.

Lo sé, lo he vivido y casi me muero por ello, por querer controlar mi vida, por querer ser la mejor madre, invalidando a mi hijo, dándole casi todo, no dejándole crecer, para que no me dejara sola, como antes hice con mi familia, por ello los años que pase con fibromialgia, Fatiga Crónica, sensibilidad química y muchos mas síndromes.

Yo llevaba un programa de ser la mamá de todo el mundo, la salvadora de todos, repetía y repetía los patrones familiares, unos que abandonaron o vendieron hijos, otros que incluso los mataron antes o después de nacer, y yo iba repitiendo estos patrones, no haciendo eso, sino todo lo contrario, como también lo hacían otras personas de mi linaje, protegiendo y sacrificándome por ellos, tenia grabado a fuego, todo el dolor, el silencio, los secretos que ellos no pudieron o no quisieron expresar.

Me quejaba de que no hacia mi vida, de que era una puta mierda, aunque en realidad, hacia la vida que que yo había elegido, según la conciencia que tenia en esos momentos. La conciencia para sobrevivir, para que me quisieran, para que no me echaran del clan, (que te quede claro: nadie, ni siquiera tu mismo, te puede echar del clan), para seguir siendo fiel inconscientemente, a mi clan, a mis padres, a mis abuelos, a mis bisabuelos, e incluso a mis hermanos y a mi hijo.

Ser una hija no deseada, venir al mundo como la hija bastón, estructurante, en un parto que me tuvieron que empujar porque no quería salir, escuchar en mi infancia que no querían tener más hijos, en el que era una carga, más el proyecto sentido de papá, de mamá, que aunque me quisieron, me cuidaron, me alimentaron, todo eso quedó grabado en cada una de mis células y en mi sistema nervioso.

Como bendición, siempre he visto la vida como un vaso medio lleno, y eso siempre me ha hecho ser muy resiliente. Me he moldeado, me he sentido, he abrazo todas mis sombras y las de mi familia, las de mi linaje y hoy puedo decir:

Como veis la vida es neutra y maravillosa, nadie nos hace nada, solo tenemos que mirar hacia adentro, tomar una decisión y salir de la rueda de hámster en la que estamos metidos conscientes o inconscientes, diría mas esta ultima, la que nuestros subconsciente gobierna nuestra vida a un 95/97%.

Como siempre Gracias Gracias Gracias.

Nos encontramos en la próxima entrada, donde te hablare, del Proyecto de tu vida.

2 respuestas a «La vida es neutra. Te lo cuento»

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